REQUERIMIENTOS TÉRMICOS.

Las bajas temperaturas durante el período de emergencia puede afectar el número de plantas por hectáreas, provoca desuniformidad en la emergencia y un desarrollo desparejo del cultivo.
La actividad fotosintética aumenta con la temperatura ambiente, alcanzando la óptima a los 20º C. Para la formación de aceites la temperatura óptima es de 20 a 24º C.





DISPONIBILIDAD HÍDRICA.

Para lograr una buena germinación es necesario que la humedad del suelo oscile entre el 60 y 80 %.
Entre los 30 y 90 días el cultivo requiere alrededor de 300 mm de agua.
El girasol posee una baja capacidad de regulación estomática (lenta apertura y cierre de estomas).
El agua es sumamente necesaria durante el período de llenado de granos, pues la asimilación tiene que proveer materia seca a los granos. Mas del 80% del llenado proviene de la materia seca producida durante pos floración.

INTERCEPCIÓN DE LA LUZ SOLAR.

La luz solar sera aprovechada de acuerdo al area foliar que logre despegar la planta, su gran desarrollo va a permitir gran rendimiento.
La radeación es determinante para un efectivo llenado de granos y para una transformación en materia grasa.

DESARROLLO REPRODUCTIVO.

La aparición y apertura de flores es de forma centripeta, de modo que la fecundación se produce de la misma manera.